El peso mexicano, que al inicio del 2024 mostraba una apreciación del 0.35%, ha experimentado un giro sorprendente al ubicarse como la moneda más depreciada en la canasta amplia de principales cruces. Según datos de Monex Grupo Financiero, la divisa local alcanzó un mínimo de cuatro meses de 16.82 unidades por dólar en la primera quincena del año, pero este martes revirtió sus ganancias de manera inesperada.
Hacia el mediodía, el peso cotizaba en 17.17 unidades por billete verde, con una depreciación del 1.77% respecto al precio de referencia del lunes, llegando incluso a perder más del 2%, situándose en 17.23 unidades por dólar, el nivel más bajo desde diciembre de 2023. Rumbo al cierre de los mercados, se proyectaba una depreciación del 1.95%, alcanzando los 17.20 por dólar.
Analistas del mercado atribuyen este movimiento a factores externos, principalmente la fortaleza del dólar (DXY), influenciada por ajustes en las expectativas de recortes de tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Según Monex Grupo Financiero, casi el 44.0% del movimiento del dólar en esta sesión representa todo el observado en lo que va del 2024.
Además, la directora de Análisis Económico en Grupo Financiero BASE, Gabriela Siller Pagaza, destacó el impacto del triunfo del expresidente estadounidense Donald Trump en las elecciones primarias republicanas en Iowa. Aunque no se espera que alcance máximos históricos como en la elección anterior, la incertidumbre generada por la agresividad de Trump en temas como la crisis del fentanilo, migración y nearshoring contribuye a la volatilidad del peso.
En este contexto, los mercados han reducido sus expectativas de recortes de tasas globales, disminuyendo las probabilidades de recortes por parte de la Fed en marzo y del Banco Central Europeo en abril. Expertos coinciden en que estos factores externos, combinados con la política económica interna de México, son elementos clave que influyen en la depreciación del peso mexicano.