La vida de Ana María Serrano Céspedes, una joven estudiante de medicina de 18 años con grandes sueños y promesas, fue trágicamente truncada en un evento que ha conmocionado a la opinión pública. Conocida cariñosamente como «Nana», Ana María será recordada por su inteligencia, creatividad, vivacidad, alegría y amor.
Ana María había iniciado sus estudios de medicina en la Universidad Panamericana de la Ciudad de México apenas dos meses atrás, persiguiendo su sueño de convertirse en cardióloga. Su futuro parecía brillante, y su familia la apoyaba con orgullo en su búsqueda de la excelencia académica.
Sin embargo, el destino le tenía preparado un giro cruel. El 12 de septiembre de 2023, Ana María fue encontrada sin vida en su hogar en el municipio de Atizapán de Zaragoza, Estado de México. Las investigaciones apuntan a un feminicidio, y el presunto autor del crimen es su exnovio, Allan «N».
La madre de Ana María, Maria Ximena Céspedes, vivió un oscuro giro en su vida cuando recibió un mensaje inquietante desde el teléfono de su hija. Aproximadamente a las 18:00 horas, la familia trató de contactarla sin éxito. El mensaje que finalmente llegó, con las palabras «me das tantito», levantó una alarma en la mente de su madre, ya que no era el tipo de mensaje que esperaría de su hija.
Este trágico incidente ha adquirido notoriedad no solo debido a la brutalidad del crimen, sino también por las conexiones de Ana María. Su madre, Ximena Céspedes, es la presidenta del Comité de Comunicación Interna de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), y Ana María era sobrina de José Manuel Restrepo Abondano, exministro de Hacienda y Comercio de Colombia.
La Universidad Panamericana de la Ciudad de México, donde Ana María estudiaba, también expresó su profundo pesar y solidaridad con la familia de la estudiante, mientras la sociedad se une para exigir justicia en un caso que ha dejado a una familia destrozada y a toda una nación consternada por la pérdida de una joven con un futuro tan prometedor.
