La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha advertido sobre la dramática situación en Gaza, describiendo una situación desesperada en la que la ayuda humanitaria es insuficiente para la población hambrienta y enferma.
La situación en Gaza se ha vuelto crítica, con ciudadanos mendigando pan y recurriendo a la carne de burro para alimentarse, dado que los camiones de ayuda no pueden llegar a la mayoría del territorio palestino debido al conflicto actual.
Israel ha estado llevando a cabo ataques en toda la Franja de Gaza con el objetivo de debilitar a Hamás, lo que ha obstaculizado significativamente la distribución de la ayuda humanitaria. La intensidad de los enfrentamientos y las restricciones en las carreteras principales han detenido en gran medida la entrega de suministros básicos.
En áreas como Rafah, cerca de la frontera con Egipto, se han realizado distribuciones limitadas de ayuda, pero en la mayor parte de Gaza, estas actividades se han detenido por completo debido a la escalada de hostilidades y las dificultades para la circulación.
Abdel-Aziz Mohammad, desplazado de la Ciudad de Gaza, describió la situación como desgarradora, afirmando que antes tenía una vida estable, pero después de dos meses de guerra, se encuentra mendigando pan para sobrevivir.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) también ha evidenciado la situación alarmante, con informes que muestran cómo los gazatíes desesperados detienen los camiones de ayuda para consumir los alimentos de inmediato, destacando la urgencia y el nivel de desesperación en la región.
El comisionado de UNRWA, Philippe Lazzarini, ha llegado a Ginebra después de su tercera visita a Gaza desde el inicio de la guerra, desmintiendo las acusaciones de Israel sobre desvío de ayuda y resaltando la falta de fondos para su operación humanitaria en la Franja, que hasta ahora solo ha logrado reunir la mitad de los fondos necesarios.
