En un dramático desenlace, Sergio Yobani Acevedo Ramírez, uno de los siete jóvenes secuestrados en el rancho El Potrerito, en Malpaso, Zacatecas, fue hallado con vida, mientras que los otros seis jóvenes fueron encontrados sin vida. Sergio, quien despertó con heridas en los brazos y golpes en la cabeza, afirmó a su madre que no había cometido ningún delito.
El secuestro ocurrió cuando los siete estudiantes estaban reunidos alrededor de una fogata en compañía de algunas amigas. Un grupo armado llegó repentinamente, disparando al aire y amedrentando a los jóvenes antes de llevarlos a la fuerza de la propiedad descalzos, con destino desconocido.
Las autoridades localizaron a Sergio Yobani Acevedo Ramírez y los cuerpos de sus amigos durante sobrevuelos de búsqueda cerca de la comunidad de Casa Blanca, a unos 20 kilómetros del lugar del secuestro. Sergio, gravemente herido, requirió hospitalización.
En una entrevista con Milenio, la madre de Sergio relató que su hijo, aunque lo conoce, parecía no tener noción del tiempo debido a los golpes recibidos. Durante el encuentro, Sergio le aseguró a su madre que no había estado involucrado en actividades ilícitas.
Por su parte, la Fiscalía de Zacatecas informó que el joven encontrado con vida presentaba dos heridas contusas en la región occipital y una posible fractura en el hueso occipital, así como fractura de huesos propios de la nariz. Su estado de salud se encuentra estable, según indicó el comunicado oficial de la institución. La investigación continúa para esclarecer los detalles del secuestro y la muerte de los otros jóvenes.
