Cada 2 de noviembre, se conmemora el Día de los Muertos, una festividad que busca honrar y recordar a los difuntos de la religión católica y cristiana. Aunque esta celebración es más popular en México, ha logrado extenderse a otros países de Latinoamérica. El Día de los Muertos encuentra sus raíces en la doctrina católica, que establece que después de la muerte, las almas de los fieles deben purificarse de sus pecados para llegar a Dios. Para facilitar este proceso, las familias rezan y realizan misas en honor a sus seres queridos fallecidos.
Los altares que se erigen para esta festividad son adornados con ofrendas, calaveras, decoraciones florales y el platillo favorito de comida de los difuntos. En 2008, la UNESCO declaró el Día de los Muertos como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, reconociendo su importancia como un encuentro anual entre los pueblos indígenas y sus ancestros, fortaleciendo la sociabilidad y la cultura de estas comunidades, en especial en México.
El Día de los Muertos es la continuación del Día de Todos los Santos, que se celebra el 1 de noviembre y rinde homenaje a los muertos que ya han superado el purgatorio y disfrutan de la vida eterna junto a Dios.
Además de su significado espiritual, el Día de los Muertos ha sido tema de diversas películas que exploran su rica tradición. Algunas de las películas relacionadas con esta festividad incluyen «Día de los Muertos» (2019), «Coco» (2017), «El Libro de la Vida» (2014), «La leyenda de la Nahuala» (2007) y «All Souls Day» (2005).
Esta festividad, que combina la espiritualidad, el recuerdo y la cultura, es un recordatorio de la importancia de mantener vivas nuestras tradiciones y honrar a quienes nos precedieron.
