Rafael Mier Cisneros, aspirante a la Rectoría de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), acudió acompañado de un grupo de simpatizantes universitarios para exigir su constancia de registro como candidato. Según Mier, a pesar de haber cumplido con los requisitos y de realizar la solicitud con anticipación, se le informó el domingo pasado sobre un supuesto incumplimiento en el número de firmas requeridas.
El también director con licencia de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas (FADECIPOL), afirmó que este rechazo refleja una intervención externa en el proceso universitario. “Sabíamos que iba a haber un juego sucio, pero no a este nivel”, expresó. Mier Cisneros subrayó que el 25 de octubre, día de registro, entregó toda la documentación solicitada, incluyendo el respaldo del 10% de firmas requeridas, las cuales fueron aceptadas y validadas en su momento, inclusive con la firma del presidente de la Comisión Electoral Universitaria.
Mier atribuye estas trabas a un conflicto de interés, ya que previamente denunció el parentesco entre el presidente de la Comisión Electoral y la esposa de uno de sus oponentes, generando un posible sesgo en el proceso. Esta relación, presentada en un incidente formal, sigue sin resolverse. “No puede ser presidente del Comité que vigila los procesos de elección y a la vez ser pariente cercano de un contendiente”, afirmó.
El aspirante señaló que aún no puede iniciar su campaña debido a la falta de la constancia oficial de registro, por lo que exige a la Comisión Electoral una revisión exhaustiva del número de firmas entregadas. Además, mencionó que la Comisión podría estar restando hojas del compilado original, ya que cuenta con una copia de respaldo para corroborar la integridad de las firmas, las cuales son auténticas y verificables mediante matrícula, nombre y número de contacto de cada firmante.
Mier Cisneros cuestionó también el trato desigual en el proceso, relatando que a uno de sus adversarios se le permitió completar un requisito pendiente durante el registro, utilizando recursos de la Comisión, lo que considera una muestra de parcialidad. Hasta el momento, no ha recibido notificación oficial respecto a la resolución de su registro ni sobre el incidente relacionado con el parentesco, lo cual debió informarse antes de la medianoche del lunes. Esta falta de comunicación, añadió, podría llevarlo a recurrir a instancias legales, como el amparo.
Finalmente, Mier destacó que la Comisión Electoral Universitaria, conformada por seis miembros, solo contó con cuatro para sesionar y votar sobre su caso, lo cual considera una irregularidad que propició la entrega de constancia a su contrincante, mientras a él se le niega el derecho de participar en condiciones de igualdad. “Está completamente fuera de Derecho”, concluyó el aspirante, reafirmando su intención de defender su candidatura y exigir justicia en el proceso electoral universitario.
