El jefe de la Patrulla Fronteriza (Border Patrol), Jason Owens, ha caracterizado la situación en la frontera entre Estados Unidos y México como una «amenaza a la seguridad nacional». Owens expresó su inquietud por los 140,000 migrantes que han logrado evadir la detención e ingresar subrepticiamente al país.
Owens reveló que en el año fiscal actual, se han registrado casi 1 millón de encuentros con migrantes entre los puertos de entrada entre Estados Unidos y México, y se prevé alcanzar un nuevo récord de 2 millones de detenciones antes del final del año fiscal. Sin embargo, lo que más le preocupa son las 140,000 personas que han logrado escapar.
El jefe de la Border Patrol señaló que los cárteles mexicanos están dictando las «reglas del juego» en la frontera sur, manipulando el flujo de migrantes para distraer a las autoridades mientras realizan otras actividades ilegales. Aunque la Border Patrol cuenta con más de 20,000 agentes, Owens lamentó que no son suficientes para cubrir una frontera de 1,900 millas de longitud.
Según Owens, esta situación representa «una amenaza a la seguridad nacional», ya que la falta de conocimiento sobre quién ingresa al país y cuáles son sus intenciones constituye una vulnerabilidad. La migración se ha convertido en un tema central en las campañas presidenciales en Estados Unidos, con acusaciones de «fronteras abiertas» dirigidas al presidente Joe Biden.